Hola, es un poco difícil entender, pero interpreto que las conductas de tu gato podrían significar que no ha aceptado a los otros miembros de la familia, como especies amigas (puede ser en este caso el perro), lo cual puede deberse a varias causas y lo primero sería establecer un diagnóstico profesional veterinario.

Para intentar reconstruir esa relación entre ellos, debes separar a ambos animales primeramente en distintos ambientes y con todos sus recursos por separado (plato de comida, bebida, bandeja sanitaria, cama, rascador, etc.):

•  Al separarlos permitirás que cada uno pueda desestresarse inicialmente, una vez que estén comiendo y haciendo sus necesidades (luego de algunos días) quedará establecido cuál es el espacio cerrado para cada uno y cual será un tercer espacio de la casa para presentarse.

• De forma alternativa llevaremos a cada uno, el perro y el gato, a este 3° espacio neutral, asociando el olor y la presencia lejana del otro animal a premios interesantes para cada uno (comida sabrosa, juego de caña, caricias apropiadas)

• Luego de algunos días de práctica haremos una presentación, a través de una puerta/ventana cerrada (primero sólida, luego con vidrio) también asociado a premios.

• Si no existieron reacciones de agresividad o desagrado en el proceso anterior, podemos hacer una última presentación dejando el gato dentro de un bolso/jaula transportadora o en altura, para que el otro se acerque (idealmente el que ya vivía en la casa).

Tené en cuenta que la castración podría ayudar (en el caso que este sin castrar) pero no tienen ningún sentido cortarle las uñas porque eso es sumamente estresante para el gato y muy difícil de hacer, además que las mismas van a crecer en muy poco tiempo.

Si observas que la situación no se resuelve con estas recomendaciones básicas es porque probablemente requiera una consulta veterinaria personalizada y sincrónica. Saludos y muchas gracias por el mensaje!.